lunes, 23 de mayo de 2011

verdad que duele

Vas a llorar cuando te lo diga
Vas a pensar que soy tan malvada
Y te sentirás tan indefensa
Que hasta querrás taparte los ojos para no verme más ahí
Vas a oír las cosas más terribles
Vas a ver de mis ojos las miradas más furiosas
Calamidades virtuales
Se meterán a tu cuerpo y en él nacerán nuevas y pequeñas monstruosidades
Pequeñitas
Que nadarán en tu sangre
A escondidas de ti
Y un día de pronto
Tendrás una idea malvada también
Un poco terrible
Y querrás llevarla a cabo
Ejecutarla
Decirla
Contaminar
Pasar el virus
Inocular
Y empezará a llover sobre la ciudad la rabia de todas tus verdades juntas

rabia

Me ves, vienes, y es como si fuera yo un gran tacho donde depositas tus toxinas

Tus ideas baratas y mentirosas

Tus medias verdades

Tus intenciones

Tus falsas promesas

La idea de tu vida que a nadie interesa

Me envenena

Mira cómo despido líquidos mortales

Mira cómo escupo espuma por la boca y la nariz

Me amarro con una soga de impotencia

Al cuello

Para no morderte

Cuando me pulsa el cuello

Al ritmo de tambores cavernícolas

Muerdo el labio y respiro

Y pienso

Que si sonrío una vez más te irás pronto

Y todo esto pasará

una chance

Vomitar sobre tu boca abierta para dejarte claras mis ideas

Devolverte con creces lo que me das cada vez que te me acercas

Poder decirte no, no, no es así ni lo será

Poder dejarte en claro tus grandes equivocaciones

Pero no sucede

Se detiene.

Rueda la bola lejos de aquí, ya casi no la vemos. Se cae al abismo. Se perdió para siempre la oportunidad.

ciclón


¿Cuántas veces pensabas decirme que no?

Que sí.

Si mañana tardaras tanto como hoy jamás pararía de esperarte

Detente un día

Mírame

Deshazte de mí

Se pudren mis tripas

Cuento los días

Las horas verdes

Apesta todo a descomposición

Podredumbre

Las aves van a venir a comerse mis ojos

La muerte apesta ya a dos cuadras a la redonda

Despiértame mañana y dime que fue un sueño

Que tengo un techo

Que no lo perdí todo

Tus ojos marrones me van a salvar

Tu mirada cándida

Pura limpia

Tu mirada blanca

Ahí vienen las nubes grises

Corriendo

Míralas como nos ven a los ojos

Nos gritan

Estruendos que se atornillan en el centro de mi pecho

Sientes el agua

Escuchas el viento gritando tu nombre?

Te llama

No se va detener

Sácate los zapatos,

Entremos a las olas

No esperemos a que vengan por nosotros

El mar está furioso

Démosle algo de comer