lunes, 18 de junio de 2012
la casa
miércoles, 13 de junio de 2012
Un juego
él más bien rechoncho
Sobre una loma se detiene
baja el alférez Suarez.
y lechones
él la cuida de los males,
la protege
y la alimenta.
lunes, 28 de mayo de 2012
otoño
domingo, 12 de febrero de 2012
al borde
-Yo rezo todas las noches.
-¿Qué pide en sus rezos?
-¿De qué desastre?
-¿No lo ve usted?
-No, yo sólo veo un hombre triste, desdichado, un hombre que ha perdido toda esperanza.
-No sé si he perdido algo o más bien algo va creciendo dentro de mí. Cuando le hablo a Clara ella me mira asombrada. De dónde sale todo eso, me pregunta con miedo. ¿Cómo que de dónde? De aquí adentro! De acá! Abro la boca para que mire dentro, me sacaría los ojos para que vea bien de qué esta hecho este hombre que se la folla todas las noches. Pero algo de toda esta mierda le atrae y no entiendo por qué… no se lo cuestiono tampoco, en cualquier momento se da cuenta de que estoy a punto de perder la razón y …
-¿Qué? ¿Entonces qué?
-Entonces se iría, y ya no me quedaría ni un pedazo de razón para tolerar esto un minuto más.
Música
Oír la voz de Enrique Iglesias puede deprimirme profundamente. Siento que mi vida es miserable, que no supe cómo formar parte de algo bueno. Sentado solo en mi casa oyendo la radio que pone la señora de limpieza, baladas románticas, es como estar presenciando mi propia decadencia.
Hoy soy un pueblo abandonado.
Pongo algo de Arcade Fire, siento que me representa. Esa intensidad… ellos hablan por mí. Supongo que eso es lo que cualquier fan inepto diría no? Me cago en mi falta de originalidad.
bola de pelos
Una bolita de pelo negro al viento transita despacio por encima de mi cabeza. La gata la ve, y desde su silla salta ágilmente, toma vuelo, salta sobre mi cabeza y la agarra con la boca. Al caer al suelo la bola de pelo se le escapa y la toma con las patas, dehaciéndola en miles de pelitos pequeños que se esparcen por suelo. La gata los mira y se queda detenida un instante. La miro, y desde acá arriba adivino que irá por el más cercano y luego al de al lado, y así, los irá tomando todos con las patas hasta juntarlos. La gata, en cambio, los deja y vuelve a su silla a esperar uno que se no deshaga cuando lo agarra.